Design Thinking: El equilibrio que impulsa la innovación

El design thinking busca un balance entre tres factores clave:
✅ Deseabilidad (lo que las personas necesitan)
✅ Factibilidad (lo que la tecnología permite)
✅ Viabilidad (lo que es sostenible económicamente)

En lugar de priorizar uno, navega creativamente entre los tres para generar soluciones innovadoras.

Deseabilidad

¿Qué tiene sentido para las personas?
El design thinking se centra en necesidades humanas reales, no en deseos superficiales.
Se apoya en la intuición, el reconocimiento de patrones y la creación de ideas con significado emocional y funcional.

Factibilidad

¿Qué es posible implementar?
Busca soluciones que puedan hacerse realidad con la tecnología disponible en el corto plazo.

Viabilidad

¿Qué puede convertirse en un modelo de negocio sostenible?
Considera los aspectos económicos para que la innovación sea práctica y duradera.

¿Por qué es diferente?

• No es lineal: Es un proceso iterativo y exploratorio.
• Fomenta colaboración: Equipos interdisciplinarios comparten ideas y responsabilidad.
• Genera hallazgos inesperados: Se adapta sobre la marcha para encontrar soluciones únicas.

Un ejemplo: Nintendo Wii, que combinó experiencia atractiva, precio accesible y rentabilidad.

El design thinking integra lo humano, lo tecnológico y lo económico para crear soluciones con impacto real.
Adóptalo y transforma tu enfoque hacia la innovación.

📌 Fuente: Diseñar el cambio – Tim Brown

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