La Importancia de Dejar de Creerse Especial para Superar la Ansiedad

 

Para Fabiola Cuevas, autora de "GRACIAS ANSIEDAD - CÓMO TRANSFORMÉ LOS ATAQUES DE PÁNICO Y LA ANSIEDAD EN LIBERTAD", dejar de creerse "tan especial" fue fundamental en su proceso de superar la ansiedad. En el capítulo 26, Cuevas explica que solía verse a sí misma como la única persona que experimentaba ciertos miedos y pensamientos relacionados con la ansiedad, considerándose diferente y especial en un sentido de atención y necesidad: "con esto me refiero a que yo creía que era la única con un problema de ansiedad en el mundo, la única con esos pensamientos y miedos, la única y diferente en el mundo."

Esta perspectiva, según la autora, la llevaba a esperar un trato especial y a que los demás se centraran constantemente en su bienestar, lo cual resultaba agotador y contraproducente. Al dejar de verse como alguien excepcional en su sufrimiento, Cuevas pudo conectar con la realidad de que muchas otras personas experimentaban la ansiedad de maneras similares: "Me di cuenta de que lo que yo sentía lo sentían millones de personas más, que tenemos una conciencia compartida, que como seres humanos traemos de cierta forma los mismos retos y cuestionamientos, y que no porque yo los tuviera me hacía más importante o especial que lo demás."

Este cambio de perspectiva tuvo dos efectos principales en su proceso:

·         Disminución de la necesidad de atención: al reconocer que su experiencia no era única, Cuevas dejó de buscar constantemente la atención de los demás en relación con su ansiedad, lo que le permitió enfocarse en su sanación sin la necesidad de validación externa. "Así es que empecé a platicar sobre lo que me pasaba, y empecé a descubrir que no era la única, que muchos de mis amigos también tenían o habían tenido ataques de pánico, y que todos, al sentirnos especiales, no lo decíamos por miedo a dejar de serlo."

·         Desdramatización de la ansiedad: dejar de verse como "especial" también implicó para Cuevas una desdramatización de la propia ansiedad. Ya no se trataba de un problema único que la definía, sino de una condición más común y manejable. "Si me sentía mal, me buscaba un lugar tranquilo para ocuparme de mi, pero ya dejaba de llamar la atención con eso o querer hacerlo más importante de lo que era. De igual forma, dejé de reclamar sobre los conflictos de la infancia y de decirles lo mucho que me afectó."

En resumen, para Cuevas, dejar de verse como alguien "especial" en su ansiedad le permitió liberarse de la necesidad de atención y validación externas, así como de la dramatización de la propia condición, lo que facilitó su proceso de sanación y le permitió tomar las riendas de su bienestar.

Es importante destacar que la experiencia de cada persona con la ansiedad es única, y lo que funcionó para la autora puede no funcionar exactamente igual para otros. Sin embargo, las estrategias y acciones que describe en su libro ofrecen un mapa valioso para navegar el camino hacia la sanación y la transformación personal.